Los callos son deformidades o durezas que aparecen en los pies debido a diferentes factores, entre ellos podemos mencionar el uso incorrecto de determinados calzados, la constante fricción con el mismo o por exceso de presión.
Este es uno de los problemas más comunes que sufren las personas, no compromete la salud pero a nivel estético es bastante desagradable, además puede agrietar la piel y causar dolor.
Si nuestros pies continúan sometidos a estos factores que causan estas callosidades, lo más normal es que estos empeoren y es cuando la piel se agrieta dejando consecuencias mucho más graves. Sin embargo, lo que traemos para ti es uno de los mejores remedios naturales que puedes hacer en casa y que elimina de una vez por todas estas durezas en tus pies, sin necesidad de gastar mucho dinero en productos y cremas especializadas.
Lo que debes saber es que para eliminar los callos debes ablandar la piel y eliminar bacterias, y eso es lo que hará el remedio que estás a punto de conocer. Este es a base de cebolla y de vinagre blanco, ambos son bastante importantes y llenos de las propiedades antibacterianas y antiinflamatorias que necesitarás. Además de tener: vitamina C, potasio, magnesio, ácido fólico y más propiedades para aliviar los callos.
Receta natural para eliminar los callos de una vez por todas
Esto es lo que necesitarás para preparar el remedio que eliminará los callos y también podrá evitar al formación de hongos y ampollas.
- 1 cebolla mediana
- ¾ vaso de vinagre blanco
- 1 frasco de vidrio
- Papel film transparente
- 1 trozo de algodón
Preparación:
- Pela y lava la cebolla, de esta forma eliminarás os gérmenes que se acumulan en la superficie.
- Corta en varias rodajas y sumerge en el vinagre blanco.
- Déjalo en reposo por las próximas 4 a 8 horas, aplica antes de dormir.
Aplicación:
- Sumerge un trozo de algodón y frota sobre la callosidad.
- Luego de cubrir por completo, fija el algodón húmedo con el papel film.
- Envuelve el pie con un calcetín y deja que actúe toda la noche.
- Al día siguiente lava con agua tibia y luego con una piedra pómez frota la callosidad.
- Hazlo por 7 días y notarás el cambio.
Para terminar te aconsejamos que mantengas los pies lejos de lugares húmedos, usar zapatos cómodos y ventilados, reduce el uso de tacones, desinfecta los pies de forma regular, entre otras cosas. De esta manera evitarás la formación de las callosidades.
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